Las cápsulas de café, un dolor de cabeza ambiental
El Parque no tiene papeleras para recoger por separado las cápsulas de café porque no hay gestores en el mercado que quieran asumir su gestión.
Separar los componentes de la cápsula, ya sea aluminio o plástico, el café y su posterior reciclaje económicamente no es viable y técnicamente está mal resuelto. Algunas casas comerciales se ponen la medalla de la sostenibilidad a través del reciclaje de sus cápsulas, pero realmente es un proceso muy ineficiente y que consume mucha energía y recursos.
El café en cápsulas se ha impuesto rápidamente en nuestro entorno. España ocupa el tercer puesto en la lista de países más consumidores de cápsulas, detrás de USA e Italia y su consecuencia es una elevada generación de residuos difíciles de degradar.
En una sociedad consumista en la que la producción de residuos no disminuye es clave evitar actividades no esenciales que producen residuos.
Desde el Parque animamos a consumir café con cafeteras clásicas y que no necesitan cápsulas monodosis. La reducción de residuos es el primer paso hacia un planeta más limpio y sano.