La reciente muerte de la primatóloga Jane Goodall ha generado una gran cantidad de reconocimientos en todo el mundo. Todas la voces coinciden en destacar sus descubrimientos en los trabajos de campo con los chimpancés y sus esfuerzos para la conservación de la naturaleza y sus comunidades. Sin ir más lejos, el secretario general de la ONU António Guterres declaró: «Deja un legado extraordinario para la humanidad y para nuestro planeta».

Entre los numerosos artículos que se han publicado estos días, hay un aspecto que se repite de forma unánime: la Dra. Goodall fue una persona apasionada y nada la retuvo para seguir su sueño.

¡Pasión y sueños hechos realidad! Trabajar con ilusión, aportar valor y mejorar el mundo, ¿qué más podemos pedir? Nos ha dejado una gran referente en coherencia vital.

Uno de sus legados es la fundación Instituto Jane Goodall (IJG) que actualmente tiene presencia en 27 países y la sede española está en Barcelona. El PCB colabora con IGJ dando móviles en desuso. Estos dispositivos son tratados como residuos y se extraen los metales valiosos, generando ingresos económicos que revierten en proyectos educativos a la vez que se reduce la extracción de minerales en las zonas de origen.

A todas las recepciones del PCB podéis encontrar papeleras específicas de recogida de móviles y tabletas. Una acción sencilla que contribuye a continuar la tarea de la gran científica y persona, Jane Goodall.