Si el verano es sinónimo de sol y playa, el otoño se asocia con bosques rojos, castañas y setas.

A pocos quilómetros de casa tenemos una gran variedad de hábitats naturales y ecosistemas de gran valor ideales para disfrutar del otoño. Castillos, ermitas, cuevas, bosques de mil colores, montañas, playas o lagos sin gente… infinidad de lugares para descubrir o volver a visitar. Antes de que lleguen los días cortos y el frío del invierno, aprovechemos para estar al aire libre y descubrir los paisajes a nuestro alrededor.

El contacto regular con la naturaleza mejora la salud y el bienestar de las personas. Los espacios abiertos permiten hacer actividad física, relajarse, recuperarse del estrés, aprender cosas nuevas y compartir tiempo con familia y amigos, o conocer gente.

Tenemos muchas ideas, rutas y recomendaciones para disfrutar del tiempo libre en espacios naturales muy fáciles de consultar. Un ejemplo de fuente de información es la Red de Parques Naturales de la Diputación de Barcelona, per podéis consultar muchos otros.