La startup NIVD, que centra su actividad en la nanotecnología aplicada al campo del diagnóstico, acaba de abrir un centro de I+D en el Parque Científico de Barcelona. La compañía ha desarrollado y patentado una tecnología disruptiva que le permite diseñar nanosensores entrenados para detectar, en tiempo real, enfermedades antes de que aparezcan sus síntomas.

NIVD es una startup de base científico-tecnológica, especializada en el desarrollo de nanosensores para el diagnóstico precoz. Fue creada a finales del 2021 en Londres (Reino Unido) por la emprendedora y doctora en Biología Molecular, Sonia Trigueros, cofundadora y exdirectora del Oxford Martin Programme on Nanotechnology (Oxford Martin School-Oxford University).

La Dra. Trigueros acumula una dilatada trayectoria científica y académica en el ámbito de la nanotecnología aplicada a la medicina, desarrollada en su mayor parte en las Universidades de Oxford y Harvard. Actualmente, compagina sus funciones al frente de la startup con su actividad como profesora asociada del Departamento de Genética, Microbiología y Estadística de la Universidad de Barcelona (UB) y del Departamento de Biología de la Universidad de Oxford.

La compañía ha apostado por el Parque Científico de Barcelona como punto estratégico para centralizar su actividad de I+D+i: «Es un ecosistema que nos ofrece un marco de referencia científico y tecnológico privilegiado, donde se promueve la investigación excelente para contribuir a los avances científicos. El Parque dispone de una infraestructura excelente para desarrollar proyectos científicos, un amplio equipo de comunicación científica y, sobre todo, de apoyo en diferentes niveles que, sin duda alguna, han sido y están siendo de inmensa ayuda para NIVD», afirma Sonia Trigueros. “Para una científica académica todo apoyo para sacar adelante proyectos de innovación es más que necesario”.

Nanodiagnóstico, una nueva tecnología de frontera

NIVD ha desarrollado una tecnología disruptiva para el diagnóstico presintomático de diferentes enfermedades a través de nanosensores.

Los nanosensores diseñados por NIVD pueden detectar marcadores en una muestra muy reducida de diferentes fluidos con una alta sensibilidad y especificidad, ya que operan a escala nanométrica.  Todo ello en tiempo real (en menos de tres minutos), y de forma directa, sin necesidad de marcadores fluorescentes o radioactivos, a diferencia de cualquier análisis biológico o clínico.

«Nuestros nanosensores pueden ser entrenados, en un periodo corto, para detectar casi instantáneamente -tan rápido y fácil como una prueba de embarazo- diferentes biomarcadores y diagnosticar enfermedades antes de que aparezcan sus síntomas en humanos, animales e incluso plantas», explica la Dra. Trigueros. «La ultrasensibilidad de nuestros sistemas nanométricos abre todo nuevo mundo de posibilidades, ya que permiten diagnosticar enfermedades lo más rápido posible».

Pero, además, apunta la científica, estos nanosensores suponen un importante ahorro en costes sanitarios en comparación con los métodos actuales de diagnóstico “en los que se tarda días o semanas para la obtención de resultados, y conllevan una inversión considerable en equipamiento de laboratorio y personal cualificado. Los nanosensores desarrollados por NIVD no requieren refrigeración ni para el transporte ni almacenamiento”.

De la oncología a los contaminantes ambientales 

En esta etapa inicial, NIVD se focalizará en el desarrollo de sensores de diagnóstico temprano para aquellas enfermedades donde exista un tratamiento que, al aplicarlo en momentos más iniciales de la enfermedad, tenga una mayor eficiencia: “Queremos mejorar, por ejemplo, la utilización de los antibióticos o la eficacia de los tratamientos contra el cáncer, algo que, sin duda alguna, es muy necesario, ya que por más terapias oncológicas innovadoras y de alta eficacia que desarrollemos, si no conseguimos aplicarlas en los estadios más tempranos del desarrollo de la enfermedad, la eficiencia será siempre limitada”.

En una fase posterior, la startup prevé expandir su tecnología desde el prediagnóstico hasta la gestión de la medicina personalizada.

Pero, además, las aplicaciones potenciales de la plataforma tecnológica desarrollada por NIVD van más allá del ámbito de la salud humana y animal: «Dado que nuestros nanosensores son capaces de detectar diferentes tipos de sustancias químicas y biológicas, la plataforma tecnológica de NIVD es muy versátil. Puede ser de gran utilidad en una gran variedad de áreas, para identificar patógenos en las plantas, o contaminantes ambientales, en el aire o el agua, por ejemplo», revela la emprendedora. “¡Este potencial de nuestra tecnología me parece fascinante!”.

La pasión de Sonia Trigueros por el mundo académico hace de NIVD, no solo una compañía de investigación e innovación, sino también, “un laboratorio dedicado a la orientación universitaria, que ofrece una puerta abierta a los estudiantes que desean conocer el camino científico y sus diferentes salidas al mundo laboral”, concluye la científica.