El papel de la enfermería en la prevención y control de infecciones es el tema de la tercera edición del ciclo Vesismin Talks, un espacio de debate promovido por la compañía Vesismin Health -presente en el Parque Científico de Barcelona- para que profesionales del sector sanitario analicen la relevancia de sus especialidades en el manejo de la reciente crisis de salud pública. En este primer encuentro, tres enfermeras con dilatada experiencia en el sector han compartido sus conocimientos, retos y múltiples historias vividas en nuestros hospitales para inspirar y empoderar a su colectivo en unos meses muy complicados en el ámbito asistencial.

Tres ponentes de excepción debatieron sobre la importancia de la enfermería en el control y la prevención de infecciones el pasado martes en el primero de los tres encuentros que el ciclo Vesismin Talks dedicará a esta especialidad: Cristina González, coordinadora de enfermería del Programa de Control de Infecciones del Parc de Salut Mar; Marta Piriz, enfermera de Prevención y Control de Infecciones en el Hospital de la Santa Creu i Sant Pau; y Soledad Gutiérrez, jefa de Calidad y Gestión de Cuidados en el Hospital Universitario Clínico San Cecilio de Granada.

Una de las cuestiones que se plantearon es la poca participación de las enfermeras en los comités sanitarios donde se producen la mayor parte de las decisiones estratégicas que les afectan. En esta línea, Marta Piriz aseguró que “No se nos libera para estar más presentes en los comités de toma de decisiones. Estamos mucho más ligadas a la asistencia del paciente que para asistir a este tipo de sesiones”.

En cuanto al abordaje de la creciente necesidad del empoderamiento de enfermería y del modelo de liderazgo en el siglo XXI, Cristina González es de la opinión de que «líder debe ser quien está capacitado para hacerlo, independientemente de su categoría profesional, por el bien del paciente; todas trabajamos unidas con un fin común, el cuidado del paciente, este es el sí de nuestra profesión».

Cuando se analizó, de forma retrospectiva, los momentos vividos durante la pandemia, las participantes reforzaron el mensaje de que la prevención y la seguridad son los factores claves para asegurar la salud, tanto de los profesionales como de los pacientes. La falta de equipos de protección individual generó mucha inquietud e incluso pánico entre los profesionales que se vieron desprotegidos para hacer frente a la atención asistencial de los pacientes.

En el inicio de la pandemia, la transmisión del Covid-19 aún era bastante desconocida; fue entonces cuando las enfermeras se organizaron para realizar formaciones continuadas in situ con el fin de reforzar los procedimientos básicos. El uso correcto de guantes o la higiene de manos, eran prácticas fundamentales, especialmente debido a la rotación del personal o a la implicación de profesionales que habían salido de su zona de experiencia profesional para dar soporte a otros ámbitos sin estar acostumbrados a los bundles de protección necesarios para hacer frente a la pandemia.

Soledad Gutierrez, por su parte, reafirmó la importancia de la formación continuada, liderada desde la Unidad de Medicina Preventiva y Salud Pública, haciendo hincapié en las necesidades específicas: “Los programas de formación intensiva permiten generar espacios de debate para conocer más en detalle las necesidades de los profesionales en términos de prevención y protección dentro del ámbito sanitario”.

La presión asistencial vivida durante la Covid-19, y el hecho de utilizar equipos de protección individual de forma continua hizo retroceder en los bundles de prevención e impidió además realizar una correcta higiene de manos. Durante los primeros meses especialmente, se trataron pacientes en espacios “improvisados” convertidos en salas abiertas, lo que ha producido que las medidas de aislamiento no se pudieran cumplir adecuadamente, llegando a influir en la transmisión cruzada de microorganismos.

A la hora de analizar aspectos a modificar, las tres ponentes coinciden en que es necesario mejorar la comunicación entre equipos; ser más críticos a la hora de seleccionar la información, en especial cuando esta no está contrastada; y optimizar el uso de equipos de protección individual para proteger más y mejor al colectivo.

En este sentido, Soledad Gutiérrez también puso el énfasis en la “emoción desde el corazón” y aseguró que, frente a futuras pandemias, volvería a actuar con la misma profesionalidad, estando muy cerca de los compañeros y, por supuesto, de los pacientes.

» Más información en la web de Vesismin Health [+]